Trata sobre el hermano de Sakura, Touya, su amigo Yukito y Yuke, el lado ''escondido'' de Yukito.
Muchos saludos.
PD: Perdón por las faltas de ortografía.
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El día en que confesé mis sentimientos
Desde que vi el primer día a Touya en el instituto, me enamoré de él. Él era muy guapo, y por tanto, muy popular entre las chicas, además, se le daban muy bien los deportes y los estudios. Era alto, moreno, y en el primer momento que nos encontramos fue muy amable conmigo. Teníamos bastante en común (los dos populares y buenos en los deportes), sólo que yo era mas bien tímido, de piel pálida y con el pelo gris.
Nunca me atreví a confesarle lo que sentía, por eso siempre iba junto a él para poder permanecer a su lado.
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El martes fui a clase y vi que Touya no estaba. Pensé que quizá le había pasado algo y vendría mas tarde, pero no lo hizo. Durante todo el día estuve decaído y me sentí un poco solo. Echaba de menos la sonrisa que me dedicaba cada mañana.
Como tenía ganas de verlo y estaba preocupado, decidí por la tarde ir a su casa con la excusa de entregarle los apuntes. Cuando llegué, estaba ansioso de escuchar su dulce voz. Pasé por la entrada de su casa que estaba llena de flores, como siempre, cuidaba el padre de Toya. Al llegar a la entrada, cuando iba a picar se abrió la puerta:
-Hola Yukito, ¿qué haces aquí? -dijo Sakura con una gran sonrisa en la cara.
-Ehm…Vengo a ver a Touya.-contesté.
-Bueno, tengo prisa, me voy con Shaoran. Quédate cuidando de él, que mi padre está trabajando.
-Vale- dije entrando.
Subí las escaleras hasta la habitación de Touya y piqué.
-Soy Yukito, ¿puedo pasar?
-Sí, pero no hagas mucho ruido que tengo dolor de cabeza.
Estuve cuidando de Touya un buen rato, pero aunque le ponía muchos paños fríos no le bajaba la fiebre, entonces me senté a su lado y sentí algo.
Toya estaba tan guapo e indefenso que no pude evitar pasar mis dedos pos su suave y hermoso pelo.
Entonces Touya comenzó a abrir los ojos.
-¿Yue?-dijo Toya extrañado.
-Sí, soy yo, ¿te encuentras mejor?
-Sí, pero tengo bastante calor y estoy todo sudado. Mejor voy a cambiarme de ropa.
Entonces, Touya al levantarse, como estaba tan débil perdió el equilibrio y se cayó encima de mí. Al notar su cuerpo, me excité y al mirar sus labios fijamente, no me pude controlar y le besé. Toya, sobresaltado, se apartó de mí.
Estaba tan caliente… No sabía lo que hacía.
- Quieres a Yukito, ¿no? ¿Sabes que compartimos el mismo cuerpo? – dijo Yue con voz sensual.
Entonces, para provocarlo, me subí la camiseta y me toqué los pezones. Seguidamente, Toya sucumbió ante mis encantos y se tiró encima de mí.
Toya comenzó a besarme introduciendo su lengua en mi boca. A continuación, empezó a tocarme los pezones y el pecho. Nunca imaginé que fuese tan agresivo. Sentía cómo sus caricias inundaban todo mi ser. Después comenzó a bajar la mano hasta llegar a tocar mi miembro. A continuación, bajó su cabeza y la metió entre mis piernas. No paraba de chuparme el pene. Era tan increíble…
- Ah… ¡ah! To… Touya… hazme completamente tuyo.
Más tarde Toya me giró y me metió un dedo en mi agujero. Lo movió lentamente y me fue introduciendo más dedos. Sentía un placer inmenso.
- ¡Ah, Yukito! ¡Te amo!
Entonces me di cuenta, aunque lo hiciésemos, él nunca sentiría nada por mí, lo único que quería el cuerpo y el amor de Yukito. Fue cuando me percaté, Yukito y Touya tenían que estar juntos.
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¿Qué pasa, qué ocurre? ¿Qué hago así? ¿Pero qué…? No me lo podía creer. Yo con Touya, ¡mi mejor amigo!
Estaba tan avergonzado… Cogí mi ropa y salí corriendo de la casa de Touya mientras podía oír cómo me llamaba tras de mí.
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¿Cómo le podía hacer eso? Tanto que le quiero yo… ¡Seré idiota! Por la noche, no tenía hambre y me fui a mi habitación a pensar sobre lo ocurrido. Me sentía terriblemente mal y quería solucionarlo todo como fuera posible, pero no sabía qué hacer. Estaba seguro de que si intentaba hablar con él, no querría, pero debía intentarlo. Cuando todos se fueron a dormir ya de noche, llamé a Yukito.
- Hola, ¿quién es?
- Soy Touya. Quería hablar sobre lo que ha pasado hoy…
- Em… -Colgó de repente.
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Dejé el teléfono en su sitio y nervioso me fui a mí habitación.
No podía dejar de pensar en lo sucedido, estaba tan intranquilo. ¡Joder¡ ¿Qué ha pasado? No me acuerdo de nada. ¿Me ha intentado violar Touya? Siempre había querido estar entre sus brazos, pero no de esta manera. Me metí en mí cama y me quedé llorando horas hasta dormirme.
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-Yukito… Yukito… Soy Yue. Te voy a decir la verdad, he sido yo quien ha excitado y ha puesto caliente a Touya, él no es culpable. Siente un amor apasionado por ti.
Yukito se quedó aturdido por lo que había pasado, pero se dio cuenta de que podría superar cualquier obstáculo para permanecer junto a Touya. Entonces, como ya estaba más calmado, pudo dormir bien por el resto de la noche.
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Al día siguiente, el sol salió y dijo BON DIAAAAA
entonces vino un pájaro e hizo quiquiriquiiiiiiiiiiii
(No ahora en serio)
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Al día siguiente, Touya estuvo buscando y persiguiendo a Yukito durante toda la mañana y parte de la tarde, pero Yukito salía corriendo en cuanto lo veía. Touya no sabía qué hacer y no se le ocurría cómo poder hablar con él hasta que llegó la última hora, la de Educación Física, en la cual le vino la inspiración.
A Yukito le tocaba recoger el material después de las clases, así que Touya le dijo al profesor que le dejase las llaves y que ya se encargaría de cerrar la puerta del gimnasio cuando Yukito saliese.
Touya abrió la puerta de la sala de material y vio la magnífica espalda de Yukito bien fornida, como era típico de un chico deportista mientras éste guardaba el material. Touya se le acercó lentamente:
- Yukito, soy Touya, tenemos que hablar sobre lo de ayer.
- No tenemos nada de que hablar, ya me lo ha contado todo Yue.
- Yukito, espera, yo...
-Yo también te quiero.
-¿En serio?
-Sí, claro, te he amado desde el primer día que te vi.
-Yukito no sabes cuantas veces he soñado tenerte entre mis brazos, acariciarte y besarte en todas partes, incluso en el rincón más remoto.
Yukito se sonrojó y se acurrucó en los brazos de Touya.
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A Yukito le tocaba recoger el material después de las clases, así que Touya le dijo al profesor que le dejase las llaves y que ya se encargaría de cerrar la puerta del gimnasio cuando Yukito saliese.
Touya abrió la puerta de la sala de material y vio la magnífica espalda de Yukito bien fornida, como era típico de un chico deportista mientras éste guardaba el material. Touya se le acercó lentamente:
- Yukito, soy Touya, tenemos que hablar sobre lo de ayer.
- No tenemos nada de que hablar, ya me lo ha contado todo Yue.
- Yukito, espera, yo...
-Yo también te quiero.
-¿En serio?
-Sí, claro, te he amado desde el primer día que te vi.
-Yukito no sabes cuantas veces he soñado tenerte entre mis brazos, acariciarte y besarte en todas partes, incluso en el rincón más remoto.
Yukito se sonrojó y se acurrucó en los brazos de Touya.
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Entonces apareció el profesor de gimnasia y dijo:
-¿Puedo unirme a vosotros? Siempre os observo cuando hacéis deporte y movéis ese precioso culito de bombón.
-Claro que sí!!!!!!!Llama a los demás estudiantes chicos, MONTEMOS UNA ORGÍA!!!!!!!!!!!!!!!!!!!- dijeron los dos a la vez. XDXD Es broma.
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Yukito comenzó a besar el cuello de Touya y fue subiendo por su cuello, mordió su lóbulo, mientras Touya gemía. Poco a poco se fué acercando a su comisura y después le dió un hambriento beso, con lengua.
Acto seguido Touya tiro a Yukito en una de las colchonetas que estaban almacenadas una sobre otras en la sala. Pero para sorpresa de Touya, Yukito se puso encima de él, se quitó la camiseta y le dijo:
- No! Esta vez lo haré yo.
Comenzó a bajar la mano hacia sus pantalones, los desabrochó y metió la mano en su entrepierna, comenzando a estimular su gran miembro erecto. Touya comenzó a gemir y a decir:
- Oh sí, Yukito, continua. Sí...
Yukito comenzó a bajar la cabeza hasta llegar a su palo prohibido (polla), y hizo lentas lamidas, después empezó a acelerar el ritmo sacando gruñidos y gritos a Touya.
- Espera, espera... me voy a correr y quiero hacerlo dentro de ti-dijo Touya.
Touya preparo a Yukito metiendo un dedo y después añadiendo más hasta que vió que estaba lo suficiente húmedo. Yukito se agarró de sus hombros y se acomodó encima de él, comenzando a cabalgarlo. Con el rato la pasión fue incrementado y Yukito se movía cada vez más deprisa, hasta llegar al orgasmo. En acabar Yukito cayó rendido encima de Touya y descansaron un rato. En ese rato hablaron de sus sentimientos mutuos y del gran placer que acababan de experimentar.
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(EDICIÓN AMPLIADA-EXPANSIVA)
Al final, como no, empezaron a salir juntos. Cuando acabaron la universidad, comenzaron a plantearse el matrimonio y el adoptar una hija.
Y si por si tenéis curiosidad,Yue también tuvo la oportunidad de volver a fornicar con Touya.
Sakura y Shaoran acabaron rompiendo. Uriol se casó con Shaoran y Sakura de quedó con Tomoyo.Y todos vivieron felices y comieron cartas de Clow.
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